Semana 10: San Hielo y Santa Nieve

Snow is only frozen water. Curiosa evolución semanal marcada
por el agua congelada. Del infierno al cielo.

L: est+2h30'cc (+2,1kp)+est+A/L /2xHielo/Automasaje
2h28'17" - 27,91km - 5'19"/km - +363m - 124ppm
M: Hielo+est+1h50'cc+Hielo+est+A/L /Hielo/Automasaje
1h47'55" - 19,99km - 5'24"/km - +94m - 118ppm
X: D(10x4)+1h Rodillos+est+A/L /T
J: est+2h cc (+2,1kp)+est+Hielo+A/L /T
2h01'37"" - 23,71km - 5'08"/km - +192m - 127ppm
V: 3h45' XCR-Raquetas (+4,4kp)
3h47'39" - 22,13km - 10,17"/km - +634m - 127ppm
S: 1h Rodillos 'spin'+est+A/L /D(10x4) +est
D: 1h45' cc+est+A/L /T+D(10x4)
2h01'05" - 26,00km - 4'39"/km - +379m - 139ppm

[Leyenda]

Semana - Temporada
119,74 - Kilómetros totales - 994,77
1.662 - Desnivel positivo - 13.307
10.146 - Kcal consumidas - 85.809
42,00 - Kilómetros bici - 338,39
3 - Días dominadas - 29
6 - Días abdominales/lumbares - 41
0 - Metros natación - 13.500

Semana curiosa donde las haya. Empiezo con un rodaje de dos horitas con mentalidad exploradora... es decir, de dos horas y media por la clásica desorientación en bosque y aparecer por ahí lejos. Pero esta vez, me desoriento de verdad, y una vez llegado a una carretera, tiro en sentido contrario; no me suena nada, voy un poco apollardado (gran palabra), hasta que uso la neurona para algo útil: le doy al 'Ir a...' al Forerunner 405; sorpresa, voy en sentido contrario. Tardé un buen rato en ver con visión espacial, a lo Google Earth, el recorrido para comprender cómo me había ido en sentido contrario. Es un error muy gordo y no acostumbro a fallar tanto en orientación. He de reconocer que si no es por el '405' me hubiera metido fácilmente media horas más hasta que me diese cuenta del error, sin duda, me sacó de mi ceguera. Me alejé más de la cuenta y se me alargó el rodaje.

La segunda sorpresa, bastante más desagradable, fue que a unos 45' de casa me empezó a doler muchísimo el sóleo derecho; cuatro paradas a estirar y pseudomasajearme, cojera, desánimo, etc. Esto es lo que pasa por hacer 'tres semanas en una', que mola mucho hacer el cafre, pero luego el cuerpo se resiente. Preocupado llego a casa y empiezo a darle vueltas. Rápidamente acudo al hielo, los estiramientos a todas horas... y a comerme la cabeza mucho. No sé si es una molestia pasajera o una lesión que pone punto final a mi temporada, porque me localizo un preocupante bulto en la zona que me duele, lo que me desanima aún más.

Asumiendo ciertos riesgos, decido correr también el martes, a condición de hacerlo muy muy despacito y en terreno llano. Lo hago, me tengo que fijar continuamente en el ritmo para no acelerarme -no es tan fácil ir muy despacio, el cuerpo tiende a su velocidad de crucero-, y completo dos horitas en las que llego algo menos preocupado: el miércoles era de descanso y seguro que mi cuerpo lo agradecerá.

Repito el jueves lo del martes, llano, y un poco menos despacio. Sale bien, siento que está casi bien pero tengo que probarme en subidas y apretándome un poco más para saber si era una lesión fantasma o si me queda latente y en cuanto apriete volverá a reproducirse. El bulto casi ha desaparecido a base de automasajes y hielo. Lo mejor de estos días suaves es que he recuperado el kilo perdido la semana pasada.

Viernes durísimo de nieve, raquetas y hambre, llegando un poco justo al coche. Demasiado para ser una semana de transición entre dos con entrenamientos largos, la anterior con una maratón, y la que viene con algo más si puede ser. Otra vez bajo el kilo al saltarme una comida y no comer nada en el entreno: un día para perderlo y una semana para ganarlo, vaya cruz la mía.

Y el domingo, maravilloso. 95% sobre nieve pisada, estrenando zapatillas -me encanta sentir que la zapatilla me ayuda a que no me duela nada-, cielo despejado y sol a raudales, tras un día de descanso, e inspirado. Salgo moderadamente conservador, voy acelerándome y animándome con la música, y pasada la mitad ya voy a 4'20"/km. Alucino con lo bien que voy, facilísimo, con soltura, fluido: para esto entreno yo, para sentir que no me canso, para avanzar con suavidad, para sentirme fuerte. En un corto tramo de asfalto veo que el ritmo 'cae' a 3'50"/km y ya me dejo ir y disfruto el momento; al son de la apropiada 'Speed of sound' de Coldplay; a 4'00" de nuevo en el campo y sobre nieve con el 'Canon' de Pachelbel; subiendo alegre con el fantástico 'Clubbed to death (Kurayamino Mix)' de Rob D, de la banda sonora de Matrix; y acabando otra vez por debajo de 4'/km con 'I got Id' de los inmensos Pearl Jam. Pletórico. Sé que me arrepentiré en días sucesivos porque luego me dolerán las patas, pero a veces hay que hacer lo que uno sienta. Hoy me he sentido fluir.
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