Raidlight se muda

Raidlight hace tres o cuatro años eran seis personas y facturaba algo más de un millón de euros; desde entonces, sólo en personal, han crecido en plantilla fija cuatro veces, y en la actual sede literalmente ya no caben.

Cuando el fundador de la marca, Benoît Laval, decidió que había que buscar nueva casa para la marca, rebuscó durante bastantes meses hasta encontrar el emplazamiento ideal para todo lo que le bullía en la cabeza. Aparte del diseño y la logística, la nueva sede de Raidlight quiere ser también 'show room' (lugar donde exponer toda la gama) y además donde la gente pueda ir a probar el material, usarlo por circuitos balizados que habrá por la zona y a la vuelta del entrenamiento, si lo desean, comprar. Es decir, que Raidlight se abre otro poco más, si ya es conocida por su mentalidad abierta (prueba de productos antes de pasar a la serie, 'Madeinfrance', el Raidlight Team 'el equipo de todos'...) en la futura choza se podrá conocer más de la marca y usar los productos en su terreno real, la montaña, porque se está construyendo en Saint-Pierre de Chartreuse, a media hora de Grenoble, y rodeado de montañas por todos lados.

Como no podía ser de otra manera, el edificio está pensado desde el punto de vista ecológico y que 'empatice' con el entorno (por ejemplo, acabado en madera, y uso masivo del prefabricado). Un nuevo espacio donde Raidlight (y Vertical) deben continuar expandiéndose.

Si alguien quiere cotillear la localización en Google Earth, es aquí.

Un par de fotos de las obras; a mediados de febrero se hace el traslado, así que ya pueden ir apretándose las tuercas los albañiles. (Si alguien se fija en la primera foto, el material blanco es Tyvek, ese papel satinado usado como barrera de vapor en edificación... y en monos para Sables).

Algún día lo visitaré y ya contaré qué tal ha quedado.

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