Quixote Legend 2014 - Etapa 1: Alcázar-Villaverde de Guadalimar. Con buen pie

martes, 3 de junio de 2014

La previa fue lamentable y llorona, pero tenía mis razones, porque conocía el dolor, porque sé de sus limitaciones y porque lo tengo guardado en mi memoria. Suele ocurrirme al andar mucho, si no me equivoco es porque prono andando -mientras que supino corriendo-, el dedo gordo aprieta y carga desde el empeine a la rodilla, pasando por el tibial anterior y algún ligamento. Precisamente hace días iRunFar hablaba del 'high-ankle sprain', y es exactamento esto, mezclado con una sobrecarga de planta y puente longitudinal, y tríceps sural, especialmente el sóleo. El miércoles estaba reventado, me hinché a darme automasajes, a cada cual más doloroso, y francamente mal de motivación. Mal no, muy mal. Dije que en el Top10 de peores días deportivos de mi vida y me quedé corto. No llegué a perder la esperanza del todo, pero iba bastante derrotado. Si no perdí la esperanza es porque si podía correr bastante podía no irme a peor. Además, tomé una decisión arriesgada, tunear las plantillas y alzar la zona interior, la de los dedos gordos. Hacer algo así antes de meterte 50 km es un suicidio, puedes cargarte otra zona. Pero asumí el riesgo.
El viaje, el jueves, fue ameno y tranquilo, hablar con colegas hizo que me distrajese, pero simplemente de conducir y de dar un paseo por el pueblo me ponían el tibial derecho (el izquierdo estaba sólo ligeramente mejor), muy a tono. Me molestaba -y molesta- hasta la piel, sólo rozar con los dedos ya me indica que hay algo, y es el que el músculo no puede crecer por la fascia, que lo mantiene aprisionado, y cuando se inflama puede llevar semanas que baje.

En fin, entramos en contacto con el lugar, las tiendas de campaña que serían nuestra casita tres días, cambiamos el material a la megabolsa que nos proporcionó la organización y asistimos a la presentación, dentro de una bonita iglesia -no se me ocurre un entorno más alucinante-, el pueblo de Alcaraz tenía encanto pero apenas pudimos verlo, y cenamos en un convento rehabilitado con gusto. Un lujo todo y distraído, hablando, saludando viejas amistades y conociendo nuevas (lo que da un estúpido blog de sí, oye); y tratando de distraerme a la par que llenar el buche. Intentamos acostarnos pronto, pero todo el rato con el runrún en la cabeza, la clave era dónde me iba a empezar a molestar y limitar no si lo iba a hacer o no. Y a partir de ahí, sufrir y sufrir, algo que detesto porque sí, pero si tomo la salida de una carrera es en consecuencia, ni voy de paseo ni tengo planeado retirarme. Y esta forma de pensar no siempre es inteligente pero es la que hay por encima de mis hombros.


Al día siguiente, andar pesado hacia la salida, cierta preocupación, y a por ello. Salida en bajada... y el tibial dando las primeras señales de aviso. En 300 m me paro a mear con lo que David se me va. Fui con un colega con el que pensaba correr lo que pudiera, pero sin plan de ir en equipo, él anda bien pero iba corto, pero en el momento en el que se me pusiese la pata de palo, adiós muy buenas. Desde la salida, suave subida, tranquilos, recuperando puestos, pista, dejando pasar los kilómetros, sin prisa, hablando, gestionando. Los más montañeros detestan las pistacas, no es que me apasionen, pero al menos cunde el esfuerzo, avanzas kilómetros en poco tiempo y se agradece. Duró el tema trece kilómetros, luego irían alternándose senderos y pista, hasta el primer avituallamiento, kilómetro dieciocho donde habría un rampón considerable.

Una de las características de la prueba es que sólo tiene dos avituallamientos por etapa, es algo a tener en cuenta porque implica tramos de en torno a 15-20 km, con lo que hay que planificar comida y agua. Pero también esfuerzo y motivación. La verdad, me gusta bastante, no puedo estar más de acuerdo con el organizador, estamos convirtiendo las montañas en pistas de atletismo. En general parábamos más tiempo que nuestro entorno, pero comíamos bien, sin prisa y abundantemente.

Primera subida seria, Almenara, piedras, trepada... pero la sorpresa vendría después, un cresteo curioso, con tramos técnicos y en contadas ocasiones, expuesto. Bonito también, pero con tacto, especialmente si eres un patán. Luego vendría un descenso por sendero hasta una pista. Nos sorprendieron las vistas, la cantidad de piedras y lo serio del terreno, pero sería la tónica no una singularidad, y es que las sierras donde se desarrollaba la carrera no serán especialmente famosas, pero son sierras y montañas de verdad. Seguíamos en modo conservador, sin ir de paseo, pero con cabeza. En la pista de bajada íbamos a 11-13 km/h, buen ritmo, y nos pasó la primera mujer volando, iban tres en cinco minutos, alucinamos bastante y vaticiné que alguna de las tres "moría" al día siguiente. No me equivoqué, pero es que iban a cuchillo. No quita el nivelón que tienen.


El perfil luego indicaba dos rampas cortas y a ojo empezaba a interpretar las altimetrías: rampa tirando a vertical era andando y en muchas ocasiones campo a través o casi. Otra de las tónicas, bastante campo a través, por zonas pedregosas, casi sin sendero, cuidando dónde pisabas. Todo seguía yendo bien, controlando y con el tibial al dente pero aún sin doler. Seguían pasando los kilómetros, íbamos a ritmo decente, sin apurarnos pero sin ir de paseo. En la bajadilla previa al segundo avituallamiento noté por primera vez síntomas de cansancio, pero para llegar a éste había que subir, y como es lo que se me da bien, recuperé algo. Al igual que en en el primer avituallamiento, éste también estaba a pie de rampón, pero ya estábamos en el kilómetro 36. Subida maja, bosque, zona "fuera pista", pistilla... y claro, hay que subir a las antenas aquellas a tomar por saco, cómo no, y no nos ponen la alfombra del chip en la puntita de la misma de milagro. También estábamos comprendiendo la idiosincrasia del trazador, mezcla de valiente cabronazo con exquisito gusto.

Al comenzar la bajada le digo a David, "cuidado no la caguemos ahora". 25" después se me parte una piedra, caigo levemente y me pego en las dos rodillas con sendas piedras. Duele, pero nada serio, aparte de la confianza. La recupero en el sendero final -donde David gasta una de sus vidas en un tropezón cercano al despegue en ala delta-: precioso, corrible, y donde vamos con fluidez con más de una maratón en las patas, lo que nos da un gran subidón. Vamos entrando en el pueblo y tenemos un ánimo muy positivo, porque nos hemos cascado 47,5 km, +2500 m y estamos francamente bien. Así se empieza una carrera por etapas. Cruzamos la meta de Villaverde de Guadalimar orgullosos del trabajo bien hecho.


Lo siguiente en etapas es empezar a recuperar lo antes posible, piernas en el río (prefiero sufrir corriendo, duré poco), ducha (fría, el infierno; bueno, ducha ducha eso no fue), ropa limpia, comer... y a darle a la lengua, que es lo mejor de esto. Ni en sueños me podía imaginar que me iba a ir tan bien de sensaciones, sobre todo con el profundo respeto que llevaba, sabía que el segundo día iba a rematarme los cuádriceps, pero al menos había conservado bien. Y el tibial, seguía al límite, pero sin dolor. Me dieron mucho la lata los meñiques porque se me salían los Injinji (por echarme vaselina), pero no tenía ampollas. Ligeras molestias por varios lados, pero coño, era maratón y pico con fuerte desnivel. Y no habíamos ido de paseo, seis horas para esa distancia y desnivel es un tiempo respetable, cierto que nos había ganado hasta el Tato, pero me la suda, prefiero correr bien y tener buenas sensaciones. Nos había gustado todo, recorrido, terreno, marcaje, avituallamientos surtidos, ambiente sano y animado, y habíamos hecho una gran etapa. Sólo lo enturbiaba la pésima previsión meteorológica del día siguiente. Pero eso sería mañana.
s

+: Quixote Legend

Fotos: Quixote Legend, Chelis Valle, gentuza

8 comentarios:

Mr. Burns dijo...

Hola

Circula por redes sociales una foto con un listado de subvenciones de Castilla La Mancha, donde dan 75.000 euros a Creativos Outdoor S.L en concepto de organización del Quixote Legend, que por otro lado cobran lo que cobran en la inscripción y dicen que no ganan dinero con la carrera.

¿Como ves el asunto desde dentro con los servicios que dan al corredor y la logística de la prueba?. ¿Realmente crees que con patrocinadores+subvención+cuotas da justo para cubrir gastos?.

Y un tema de debate interesante:
¿Hay que subvencionar este tipo de pruebas cosas?. Supongo que son un reclamo turístico. ¿Pero no sería mejor subvencionar con medios materiales que con dinero a una empresa privada?

ser13gio dijo...

Pronto ha salido el tema...

La verdad, aunque he currado algo en organizaciones y no voy con los ojos cerrados por el mundo, desconozco los gastos reales de esta prueba concreta, pero con la inscripción me da que no pagas todo, el montaje es potente, es una carrera difícil de organizar y mucho más cara que cualquier otra normal. Algo se ganará, pero intuyo que muy poco, vamos, te diría que te lo aseguro, pero no es mi guerra ni conozco los detalles. Ganar digo como empresa, si la prueba tiene x empleados fijos, su sueldo (si es razonable) no es ganar, entiéndase.

Es una promoción turística, para mí mejor esto que poner un anuncio en la tele o una página en el dominical del El País, pero cada uno hace con su dinero lo que cree mejor y en esta ocasión nos pilla cerca. La inversión es directa, es decir, no un anuncio que esperas que haga esto o lo otro, sino que creas algo (ayudas a crear, más bien), algo que personalmente lo prefiero.

Hay veces que con dar camisetas vale, otras hay que aflojar la chequera, depende qué hagas y para qué. Un stand de FITUR, azafatas, alquiler de espacio, catering y demás son a veces cientos de miles de euros por unos días, no me parece mal y tendrá su sentido, es otra forma de promoción más, pero no hay pago en especie al IFEMA. Esta promoción de una zona es como es, desconozco si se puede hacer con menos dinero, el futuro que tiene y demás, pero por mi parte -y creo que la de muchos- hemos alucinado con la zona, volvemos encantados y la organización es de gran nivel. Lo que no quita lo anterior.

A pesar del post de la Transvulcania, creo que lo dejé claro, no estoy en contra de la subvención pública, puede ser un agente activador muy bueno, a veces el único (dime tú a mí quién si no iba a hacer una carrera de mataos corriendo en Albacete, en Canarias se podían unir los hosteleros y pagarlo, aquí no, seguro, ni hay hoteles como aquel que dice); tiene que ser proporcional, razonable y sabiendo que lo que pones en un sitio lo quitas de otro. Y que el dinero es de todos. De lo que estoy en contra es de los buitres, aprovechados, mediadores y del despilfarro, hubo mucho comentario hacia los políticos en esa entrada de la Transvulcania, y poco hacia otros que tienen el rostro más duro que el mármol de Carrara.

Las subvenciones con dinero a empresas privadas están a la orden del día, desde créditos ICO y similares, las ahora ilegales del Gobierno Vasco o incluso el PIVE para renovar tu coche o el de tu empresa, pueden reactivar, generar movimiento, incluso ganar dinero con ello, pero lo dicho, meditado, razonable y haciéndolo bien.

Saludos,
s

Anónimo dijo...

Gran respuesta Nano.
Era obvio que esa cifra iba a perseguir a la organización. Suena brutal en estos tiempos...
Somal

ser13gio dijo...

Las inversiones no son buenas ni malas 'per se', no estoy en contra ni a favor radicalmente, hay casos donde es "imprescindible", otras donde afecta al mercado destruyendo la competencia. Como todo lo público, hay que hacerlo con cuidado y medida, pero no creo tampoco en el 'librecambismo' radical, montar una carrera cerca de Madrid tiene unas ventajas que fuera de esta área de influencia nadie tiene, esas desigualdades las reequilibran a veces los sectores públicos. pero ya digo, caso por caso y con cuidado.

Saludos,
s

P.D.: esta tarde-noche lo debatimos en T.T.

Mr. Burns dijo...

A ver no se me malinterprete la pregunta, que va sin ánimo de criticar. Como no tengo claro el tema, pregunto para ver si se me aclara. No hay más, no hay segunda intención, que conste.

Estoy a favor de las subvenciones en el deporte y formo parte de la organización de una carrera (con más de 1000 inscritos este año). Damos bastante servicio al corredor, no recibimos subvenciones y no perdemos dinero...aunque tampoco ganamos.

Creo creo que la subvención se debería priorizar sobre aquellos eventos que sin subvención serían difícilmente realizables. Si una carrera da dinero, no creo que deba ser subvencionada, al menos con dinero en metálico. Si hay interés turístico o de cualquier otra índole, la administración puede aportar cosas en especie que tienen un valor económico, pero que no llenan el bolsillo del organizador.

Si hace falta adelantar algo de pasta para ponerla en marcha porque es de interés turístico, se puede recurrir a créditos blandos (al 0%) que el organizador devuelve. Hay mil formas de hacerlo.

75.000 euros para tres días, que es como tres carreras, tampoco es tanto según con que se compare. En mi región, un famoso 10km urbano de caracter internacional recibe más de 25.000 euros, pero claro, supongo que parte se van en pagar premios. La diferencia de euro por km subvencionado en una y otra es brutal.

Un saludo y ahora a leer la 2ª parte de la crónica.

ser13gio dijo...

Es un tema que no tengo 100 % claro, pero más o menos tiendo a una postura. En general no me apasionan las subvenciones, pero tienen su razón de ser en el mundo, y buena parte es para reequilibrar algo que por naturaleza no lo está, o para dar un empujón inicial. En un mundo ideal todo se debería de autosustentar y autofinanciar, pero no es así la realidad. Lo que sí tengo claro es que debe de ser transparente, proporcional y a ser posible apolítico. No es un tema fácil y creo que se debe estudiar caso a caso.

Saludos,
s

Anónimo dijo...

Igual con esta información se aclara el tema que huele bastante mal http://eldiadigital.es/not/93276/__posibles_irregularidades__en_la_organizacion_de_la_prueba_deportiva_quixote_legend/

ser13gio dijo...

Conocía ese enlace, Anónimo (qué raro, oye...), esta carrera se está usando como arma arrojadiza para políticos. Igual que el tema de la Transvulcania. Que se investigue si lo merece y se saquen conclusiones, me parece bien.

Pero esto es mamoneo político -si lo hubiere- nada que ver con la subvención en sí (si se deben subvencionar competiciones, pros/contras, retorno de inversión, etc. que es lo que hemos hablado aquí y ayer en Territorio Trail) que puede estar bien dado.

Por cierto, existe la figura del procedimiento negociado sin publicidad, desconozco si es de aplicación aquí, pero si la idea es tuya y la ofreces, no debería ser justo que luego saliese a concurso para explotarla, ¿no?

Saludos,
s

Related Posts with Thumbnails