Desde Petra

jueves, 8 de noviembre de 2001

Aquí estamos, chavalines.

(Perdón por no poner acentos, pero es esta parte del mundo no los conocen; y por las enies de "conio")(Este puto ordenador tiene el botón de power donde en el mío se borra, con lo que ya he dejado dos ordenadores apagados y ahí se han quedado; esta un payo comprobando los cables porque algo va mal... y he sido yo y mis zarpitas)

Pues eso, que hemos llegado, que no es poco. Ha sido enorme en todos los sentidos, de los paisajes a la dureza del terreno. Para que os hagáis una idea, los 104 primeros kilómetros eran todos de arena (como de playa, que note hundes hasta el tobillo, pero casi); y "Machito Perdiz" se ha clavado los 80 primeros corriendo "a machete". No me preguntéis cómo, porque no lo sé. En serio que no me creo que se pueda correr tanta distancia sobre ese terreno. El km 104 era el final del desierto, por cierto, acojonante, porque no es sólo arena en plan Sâhara, sino que cada 500m hay unas formaciones rocosas altas (unos 400m a ojo) y con unas formas alucinantes (a ver si salen fotitos). Algo bonito ha sido que estábamos perdidos del mundo, y no hay nadie haciendo turismo, algo realmente difícil en estos lares. La gente de por aquí está jodida por lo del turismo, porque es la mayor fuente de ingresos; por cierto, ningún problema de polla de atentados y la gente de putísima madre, y como muchos hablan inglés, pues cojonudo.

En el km 40 empecé a tener serios problemas, y en unos diez kilómetros, me empezó a doler mucho una rodilla, me molestó mucho la espalda y perdí dos lentillas. Lo de la rodilla, puede ser por la arena, por el peso, o por las dos cosas; lo de la espalda, no lo comprendo, porque la tengo currada, he entrenado un mes con ella y he hecho salidas de cuatro días con más peso; y lo de las lentillas... pues eso, había que redondear el sector.

El 104 era el final del desierto, como decía, y llegue a las 0215h, habiendo salido a las 0830h; son muchas horas (no se cuántas y no voy a calcularlo, que no tengo a mano una calculadora); estaba muy cansado, la rodilla me dolía muchísimo, la espalda también y hacía mucho frío; venían montañas y altitud (1500m que está bien) y decidí parar. Descansé mal, me dormí y me desperté al amanecer, pero no pasaba nada. Uno de los mejores recuerdos que me llevo a casa es correr por el desierto de noche y solo; estuve unas siete horas (anochece a las 1730h) perdido del mundo con la única luz de la Luna y de las balizas cada medio kilómetro. De verdad que alucinante. Luego empezaba la montaña, un terreno muy parecido a las imágenes que se pueden ver de Afganistán, montañas peladas (o si no, plantan piedras). Durísimo, piedras, subebaja durísimo, y con una que llevábamos ya encima de cuidado. Encima me junté con el colega mejicano y me llevó un montón de horas "a machete", porque iba un pelo más rápido que yo, y casi acaba conmigo. Luego nos vino una subida infinita, y casi morimos; de poder coger a siete tíos, pasamos a que nos enganchara uno; nos tuvimos que sentar en una piedra, cabeza gacha... muertos de verdad (por la noche, en el hotel, el colega me dijo que él se había quedado dormido en esos instantes de descanso). Sigo sin saber cómo, después de esto, se puede seguir, y nos quedaban muchas horas.

Y se nos volvió a hacer de noche llegando a Petra. El que diseñó el puto recorrido debía de ser el puto diablo. Cuando llevas 160km, te meten una bajada muy técnica y larga de piedras (y de noche, para nosotros), subidas largas y el final con 570 escalones de bajada y un kilómetro de infinito cañón. Nos encontramos a un inglés, apodado por mí 'GPS', que no encontraba la senda, se la encontramos nosotros y ahora que acabo de hablar con él me ha dicho que se echó a dormir dos horas porque no encontraba el lugar por el que se cogían los escalones; pedazo de lince, el payo....

Y el final apoteósico. En el km 165 reventé (manda huevos), no veía ni por donde iba. Me tomé unos cacharros y me senté en una piedra. Y de repente, en cuanto me siento, veo tres lucecitas... y una polla me iban a pasar a mi. Había una zona difícil de encontrar y se nos echaron encima, y una piba (que estuvo liderando la clasificación femenina hasta que cascó en el 104; había hecho yo muchos kms con ella) se me pega al culo... a correr... a estas alturas. Nos bajamos los 570 escalones a toda la hostia del mundo, de noche, y mi frontal que se le iba la pila (veía amarillo, cuando veía, y ni por asomo iba a ponerme a cambiar las pilas). Los escalones eran irregulares y alguna vez había caídas de varios metros, por lo que había que andarse con cuidadito. Total que bajamos jugándonosla y llegamos al cañón ("siq" en árabe); la hija puta a 20m y yo corriendo como poseído por las drogas. El puto cañón, que era infinito, se me hizo eterno y la puta francesa fea y chepuda todo el rato metiéndome presión (y yo al mejicano, que iba delante). Total que por fin vemos meta (35 horas...), me confundo por donde se entra... y me gana la guarra. Se me quedó una cara de gilipollas que no veas. Cago en su puta calavera. Me hubiese gustado llegar al atardecer a Petra por la gama de rojos de la piedra; pero por la noche nos marcaron los escalones y el cañón con candiles, y era muy bonito, solos, corriendo entre paredes de cien metros de alto, a veces de cuatro de ancho, y con esa luz y nuestro frontal. (Por cierto, que en las clasificaciones, las diferencias no coinciden, llegamos los tres en un minuto. Pero me la suda.)

Estoy muy contento, y ahora ya en la lejanía, veo que le he echado huevos y sé que esto ya empieza a estar al alcance de poca gente. Según el mejicano que ha corrido la Marathon des Sables (270km, desierto, Marruecos, siete días, etapas de unos 25-30km y una de 80, el summum en el atletismo extremo), esa es comercial, para los medios de comunicación y el aperitivo de esta... No sé, pero esta es la repolla. Y preciosa. Estamos en un hotel de alucinar, y me he pegado un desayuno de realucinar.

El que le cuente esto a mis padres, muere: en la habitación me dio un pequeño jamacuco y me fui al suelo, con buena hostia con una mesa de por medio. Me quedé inconsciente unos segundos, para susto del mejicano, compañero de habitación. Se me ha hinchado el labio y me he abierto la ceja, pero no ha necesitado puntos. Con un poco de suerte para el sábado ni se me nota. Es que después del palizón vas bajo de todo, la presión arterial, el azúcar, que te relajas, y eso, que se me piró. También me pasó en la ducha y apenas fui capaz de cenar. Pero he podido dormir algo a pesar de lo que me duele la rodilla, y estoy más o menos bien. Se nos ve a la legua a los que somos participantes y los que son de la organización o periodistas: los que parece que nos han dado por culo con un condón de ortigas, son los que han corrido.

Y nada más, que tenemos unos días de asueto (las ventajas de correr "rápido") y que el sábado vuelvo, no sé cuándo, no me acuerdo. Casi mejor que el sábado salimos de marcha, pero sin continuarla el domingo, y como mucho una botella por persona. Joder, no puedo ni con mi alma. Me duele todo. Hasta las cejas... Coño, yo creo que ni haciendo motocross con los ojos vendados y el acelerador bloqueado a tope tendría tantas lesiones y tantas leches. Tendríais que ver los gepetos de la peña que llega... que se jodan.

Pues eso, que me las piro a cojear por aquí un poco. No creo que vuelva a mandar nada ni leer, porque no he venido aquí a ver putos ordenadores.

Nos vemos.
Cuidarse.
Bye.
s

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Desert Cup - Slide

miércoles, 7 de noviembre de 2001


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Desert Cup - Vídeos

martes, 6 de noviembre de 2001

Aunque no se corresponden con la edición que yo corrí, estos vídeos creo que reflejan bastante bien el tipo de prueba donde me estrené en esto del ultramaratón bruto.

Edición 2002, tres partes. El sentido era inverso al que yo hice, saliendo de Petra y acabando en Wadi Rum, creo que ligeramente más suave. Y personalmente prefiero acabar en Petra.

Y de la primera edición, la del año 2000.

+: YouTube - canal 'ser13gio'

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Addenda - Desert Cup 2001

domingo, 4 de noviembre de 2001

Como casi siempre, la primera vez se recuerda con cariño. Ahora sé la "locura" que cometí, pero entonces era joven e inconsciente... Ahora creo que se puede obtener información con más facilidad, es relativamente sencillo conocer a alguien que ha hecho algo parecido para pedir consejo, ¡tenemos internet! Qué había de esto en 2001. Pues, en mi caso, nada. Salto mortal con tirabuzones y sin mirar si había agua o no.

Cómo me dio por la Desert Cup. ¿Por qué no la clásica Marathon des Sables? Pues no sé, en parte por un pequeño reportaje que sacaron en su día en Eurosport y que me dejó impresionado. Pero me sentía humano e incapaz de hacer cosas así, eso no era lo mío. Pero bueno, había hecho 100km, es sólo dos terceras partes más, ¿no? No, macho, no. Son cuatro maratones consecutivas, y todavía está por ver cuándo acabas completamente fresco de la primera, cuándo centrado pero no machacado la segunda, y cuándo te arrastras a partir de la tercera. Yo siempre hago la típica comparación con la distancia maratón: el primer cuarto tienes que estar mirando los edificios, las montañas, relajado, a tu ritmo, pero un poco descentrado; la media la tienes que pasar entrado en carrera, centrado, en tus tiempos previstos, pero poquito más que cansado; las vacas flacas llegan rozando el tercer cuarto, por donde debe andar al famoso "muro"; y, el final, pues como buenamente puedas, si tienes fuerzas bien, y si no las tienes, pues te jodes y te arrastras. Compárese esto con correr 168km. ¿Quién tiene los santos cojones de correr 84km e ir moderadamente fresco? Yo no, desde luego. ¿Entonces cómo te planteas esto? ¿O cómo me lo planteé yo en su día? Y yo qué coño sé. Si has hecho alguna distancia por encima de maratón, 100km en mi caso, se puede decir que "estás preparado", pero tienes que tener unas considerables cantidades de fe en ti y en alguna deidad, porque si no es impensable e irracional planteártelo, de verdad. Pero nadie ha destacado la inteligencia en mí, así que apaga el cerebro un segundo y di 'sí', y una vez que lo has dicho, no te vas a retractar.

¿Cómo entrené para esto? Con pobres conocimientos, sin nadie que me aconsejase, con mucha motivación, y haciendo alguna "locura", como la semana más dura que he hecho en mi vida: tres sesiones diarias de una hora, unos 36km, a las 0900h, a las 1600h y a las 0300h, con lo que pretendí desorientar a mi cuerpo, y lo conseguí, claro. Además, para endurecerlo un poco más, lo empecé un poco malo, y me llevó algún día recuperarme, y cuando empezaba a recuperarme ya estaba doblado del entrenamiento en sí.

Recuerdo que hice entrenos muy duros, madrugando mucho para ganarme unos pocos dineros y costearme la carrera. Trabajé en Leroy&Merlin, a 50km de casa, me tenía que levantar a las 0515h, mucho tren, mucha hambre que pasé, y aterrizaba en casa a eso de las 1600h, justo para irme a entrenar sin comer. Desde luego que estaba motivado.

Recuerdo como si fuera ayer cuando hablé con el representante de la carrera en España y me dijo que la prueba costaría 300.000 pesetas. Se me vino el mundo encima porque no me esperaba tanto; al final me tuvieron que dejar dinero mis santos padres, porque ya estaba metido hasta las cejas en la dichosa Desert Cup.

También recuerdo como si fuera ayer cuando unos bastardos estrellaron unos aviones contra las torres gemelas y yo lo primero que pensé es que me había quedado sin carrera. Pero no, se mantuvo (olé por Patrick), pero eso mismo, o, mejor dicho, lo que vino después -la invasión de Iraq- han hecho que se celebrase sólo un año más. Una gran pérdida.

Entrené con fe, con muchas ganas, conseguí reunir el dinero y me fui. Sufrí como casi nunca en mi vida, me encontré bien, me arrastré muchísimo, pasé un frío atroz por la noche, tuve que parar a dormir, me destrocé en una puta subida completamente reventado. Viví lo que no había vivido en toda mi vida deportiva anterior. Y por eso sigo en ello. Y por eso me he gastado tantísimo dinero en carreras de estas.

Si no lo has probado, piénsatelo antes de hacerlo, no vaya a ser que te infectes; y si ya lo has hecho, seguro que has afirmado más de una vez en los anteriores párrafos.

Recuerdos maravillosos. Recuerdos durísimos. Recuerdos maravillosos.
2-1.
s

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X-Man Vielha

domingo, 8 de julio de 2001

Aún no derrotado por mis tobillos, volví a los Pirineos a hacer una nueva prueba. Fallecida la Aneto X-Treme Marathon, el organizador, No Limit, se sacó de la manga una nueva, cerca, en Vielha (o Viella), otra maratón, subiendo esta vez a un pico mucho menos emblemático, el Tuc de Mullères. Además hicieron una versión 'light', una media maratón, el día anterior (sábado) por la tarde, para aquellos que veían la maratón demasiado lejana... o que iban a por las dos. Alguien, el año anterior creo recordar, había tenido la idea de correr ambas, y el organizador, avispado, hizo una nueva categoría para aquellos que quisieran/quisiéramos hacer las dos. Y claro, nos pusieron el caramelo en la boca, y lo saboreamos... Con el rimbombante nombre de 'X-Man' se presentaría una cuasi carrera por etapas curiosa y durilla.

El sábado por la tarde hacíamos esa media maratón, de perfil suave, terreno amable, más pensada para aquellos que empezaban en este mundillo de la montaña. Buena idea. Para los que fuimos al X-Man fue un buen "calentamiento", a buen ritmo y perfecto para no salir descansados el domingo. Yo me preocupé más de cuidar mis tobillos que otra cosa, y me fue bien, porque los conservé sanos y salvos. Fui séptimo, tercero en nuestra clasificación particular, 2h12'.

El domingo era la fiesta buena. No recuerdo demasiado, pero sí que fuimos a buen ritmo la subida (casi era todo subida-media vuelta-todo bajada), sin asfixiarme mucho, llegamos a la nieve y todo bien, pero coronamos un paso (Quico Soler ya estaba volando de bajada) y todo me empezó a ir mal. Fui increíblemente torpe en la nieve a media ladera, continuamente pegando resbalones algo peligrosos, con lo que perdí muchísimo tiempo. Después una zona apurada de cuerda fija y coronamos sobre grandes bloques de piedra. Lo peor estaba por venir, porque al montarse un poco de atasco en la zona de cuerda fija en mi vuelta -la ida para la mayoría- sí que lo vi ciertamente peligroso, porque nos aferrábamos a esa cuerda, y unas veces se tensaba y otras se destensaba, asomándote peligrosamente a una buena caída de consecuencias inciertas. No me gustó ese tramo, aunque desde luego que de emoción tuvo una gran dosis... je je. La bajada empezó bien, controlando muchísimo el ritmo, tranquilo, sin lanzarme para no hacer peligrar mis débiles tobillos, todo bien. ¡Incluso gente me adelantaba y no me iba tras ellos! Todo bien hasta que me torcí el tobillo, con hostiazo y revolcón incluido. De nuevo mi fantasma aparecía, y de qué manera. Porque me hice muchísimo daño. Una amable pareja me ayudó, me pusieron una venda y a duras penas pude seguir, tras perder no menos de diez minutos. Y con la moral destrozada. Creo que di las gracias a esa amable gente, pero me encontraba tan triste que es posible que se me olvidase. Bajé dolorido un rato, después mejor, pero muy muy lento. Y cuando, mucho después, cogí de nuevo la pista, saqué la mierda que llevaba dentro y volé: creo que pocas veces he corrido tan rápido en mi vida, literalmente volaba, en parte por la rabia que había acumulado en esa bajada y en parte porque bajar tan despacio no me había cansado apenas.

Llegué quinto en la X-Man. Bonita carrera, pobres tobillos.
s

+: No Limit

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